Sirenas...
Estamos en Sicilia, en Capodimonte...es un pueblo pequeño, muy pequeño, y blanco, muy blanco.casi tan blanco como el fulgor de tus dientes de perla...al frente, el golfo Di Sorrento, detras, el monte Di san Genaro. Son las 12 del mediodia.las mujeres arreglan los aparejos de pesca, cosen las redes, rien, cotillean... El sol pega fuerte, los perros buscan la sombra de algun arbol. Es el verano, el sudor chorrea por la frente de un artesano, que vende sus vasijas de barro, a voz en grito, acompañado de su borrico.los niños juegan por las calles, corren y chillan, mientras las niñas, cantan bonitas canciones, con sus vocecillas nacaradas.en la plaza del pueblo, en la taberna, los hombres hablan de sus cosas, el mar, la pesca no es abundante en esta época del año. y ellos viven de eso, son pescadores. Uno de ellos, Aldo, no presta demasiada atencion a la discusion, aunque pescador, siempre fue la burla de todos, su imaginacion, sus poemas, no tienen cabida entre la ruda gente de mar
Comentarios